A las dos de la madrugada del día 21 (esta noche) la Tierra alcanzará esa curiosa posición en la que su eje y el Sol estarán dentro de un plano perpendicular al de la órbita: El Solsticio de Junio.
Comienza el verano (el invierno en el hemisferio sur). Esta noche será la más corta del año y por todo el mundo se celebrarán los rituales de fuego... bueno, excepto en aquellos lugares contaminados por la Infame Iglesia Católica, en los que se pospondrá la celebración al día 24.
En esta noche de solsticio, fuego y agua se unen para vencer a la oscuridad y ayudar a desprendernos de las malas energías acumuladas desde el invierno. Los seres mágicos campan a sus anchas, las dimensiones se mezclan, las puertas se abren... La primavera se acaba pero nos deja el calor, la alegría, el noctambulismo.
Mañana será verano.
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